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¿Qué es una Competencia? – Definición, Características y Tipos

    ejemplos de competencias laborales y profesionales en el trabajo

    Definición de Competencia

    El término competencia se define como una habilidad, actitud o conocimiento que es necesario para realizar con éxito una tarea específica. Asimismo, una competencia también se refiere al enfrentamiento entre dos o más individuos por un objetivo o recurso particular.

    Existen diferentes tipos de competencias. Entre estas tenemos las competencias biológicas (entre dos individuos o grupos de una o más especies), las educativas, las económicas y laborales.

    Características de las Competencias

    Las competencias se caracterizan por ser mutables. Esto significa que las competencias pueden cambiar según el contexto, por lo que alguien competente en un área no siempre es competente en otra. Es decir, las competencias dependen del uso y el objetivo para el cual se utilicen.

    Por ejemplo, una persona puede mejorar sus competencias en el manejo de un idioma, pasando de un nivel de principiante a un nivel avanzado. De la misma forma, un individuo muy competente en medicina no necesariamente es competente en deportes o artes.

    Otra característica de una competencia es que esta se encuentra ligada a una o más habilidades. Para que un individuo o grupo posea la capacidad de conseguir un objetivo o realizar una tarea, se requiere la presencia de una serie de habilidades que permitan alcanzar ese fin. Entre las habilidades necesarias para desarrollar una competencia se encuentran las cognitivas, pedagógicas, psicomotoras, sociales, comunicativas, lingüísticas y las profesionales o laborales.

    Además, las competencias son medibles. Por ejemplo, la competencia de una persona se puede medir mediante evaluaciones, pruebas específicas o comparándose con acciones y comportamientos anteriores.

    La Competencia como un Enfrentamiento

    La competencia en el sentido de un enfrentamiento entre dos o más partes por un mismo objetivo es una situación normal que se observa tanto en el mundo natural como en el social.

    Cuando esta clase de competencia es social, usualmente implica la idea de una competición u organización en la que se enfrentan dos o más partes bajo reglas específicas. Un ejemplo de ello es un partido de fútbol entre dos equipos de una liga.

    Además, las competiciones se organizan en diferentes campos. Existen competiciones educativas, comerciales, deportivas y muchas otras.

    Tipos de Competencias

    Una competencia puede ser la capacidad de realizar una tarea gracias a que se poseen conocimientos, habilidades y actitudes específicas. Por otro lado, una competencia también se define como el enfrentamiento entre dos o más individuos por un objetivo o recurso particular. Existen muchos tipos de competencia, según estas dos definiciones. A continuación, algunos de los más importantes.

    La Competencia y su relación con la Habilidad y la Actitud

    Una habilidad es una capacidad que alguien o algo posee para realizar una acción o trabajo de forma adecuada. Así, la habilidad se relaciona con lo que define a una competencia. La educación, la actitud y la experiencia en un área particular influyen el desarrollo de una habilidad. A su vez, estos factores son importantes para la puesta en práctica de una competencia.

    En el área del aprendizaje, la habilidad para resolver problemas es fundamental. El contexto educativo y pedagógico son clave para que diferentes habilidades se produzcan o refinen.

    Por otro lado, las competencias actitudinales se relacionan con la actitud, los sentimientos y las opiniones de una persona. En este caso, se trata de lo que una persona cree, opina, siente y cómo lo manifiesta a través de su comportamiento. Por ejemplo, una persona que posee una actitud conflictiva a la hora de trabajar en grupo, difícilmente será competente para trabajos en los que se requiera formar parte de un equipo.

    Competencia Educativa

    Como se menciona en el punto anterior, una competencia educativa se define como un conjunto de habilidades que se basan en qué tan bien alguien puede aprender, comprender y usar información para resolver problemas. Es decir, una competencia educativa es el conjunto de habilidades necesarias para participar en un contexto educativo o formativo. Idealmente, el conocimiento adquirido a través de la educación tiene un objetivo. Estas competencias pedagógicas se pueden clasificar en cognitivas, afectivas y psicomotoras.

    Cuando se trata de un contexto de aprendizaje, es importante considerar cómo una competencia se integra y desarrolla en el trabajo educativo. Por ejemplo, no solo se trata de memorizar la materia vista en clase, sino que también es importante razonar y saber cómo aplicar aquello que se aprende. Es decir, las competencias educativas se expresan mediante la capacidad de comprender y aplicar conceptos en diferentes contextos.

    Para medir estas competencias, se suelen realizar pruebas, exámenes, prácticas y muchas otras herramientas de evaluación del conocimiento adquirido.

    Competencia Laboral

    En su definición más simple, una competencia laboral se refiere a la posesión de un conjunto de conocimientos o habilidades que se requieren para cumplir los objetivos y tareas específicos de un trabajo.

    Como las competencias son mutables, cambiando según el contexto, las habilidades de una persona en el lugar de trabajo dependen de las tareas que realiza en su profesión u ocupación. Así, una chef de alto nivel es muy competente para la gastronomía, la administración y el liderazgo en la cocina de un restaurant de alto nivel. Sin embargo, sus competencias en esta área quizás no sean todas aplicables para ser conductora en competencias de Fórmula 1, una doctora en medicina o una fotógrafa profesional.

    La Competencia Laboral como reclutamiento

    Una competencia laboral también se refiere a un proceso en el que las personas compiten por un trabajo determinado. Generalmente, las competiciones laborales suelen ser abiertas o cerradas. En los concursos abiertos participan candidatos y candidatas con una gran variedad de perfiles académicos y profesionales. Es decir, con competencias variadas. En el caso de los concursos cerrados, estos solo están abiertos a candidatos con determinadas calificaciones, competentes en tareas específicas.

    Las competencias laborales generalmente se evalúan al revisar los CV y durante la fase de entrevista. En este último paso, es común que se formulen preguntas sobre habilidades, formación y experiencia relevantes para el puesto de interés. Así, se determina si las candidatas y candidatos poseen las competencias necesarias para esa posición en particular.

    Algunas de las habilidades presentes en las competencias laborales son el liderazgo o capacidad para tener iniciativa, la perspicacia empresarial o de toma de decisiones de negocios, las habilidades técnicas, capacidades interpersonales o de comunicación, y el buen manejo del tiempo.

    Estas habilidades se pueden adquirir de diversas formas. Entre las más comunes están la educación formal e informal, experiencias personales relevantes y la capacitación en el propio lugar de trabajo.

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    Competencia Económica

    La competencia en el mundo de la economía se refiere a la rivalidad entre varias empresas, para proporcionar bienes y servicios, con el fin de controlar un mercado específico.

    Por ejemplo, grandes empresas como Walmart y Costco compiten por ofrecer productos al público general. Así, también se puede ver este tipo de competencias con las grandes cadenas de supermercados de un país.

    Entre sus aspectos positivos, la competencia económica beneficia a los consumidores, ya que muchas empresas terminan ofreciendo promociones o manteniendo precios bajos. Sin embargo, las empresas pequeñas empresas o empresas familiares se ven limitadas en su capacidad de competir con grandes cadenas. En muchos casos, esto resulta en su desaparición.

    Competencia Biológica

    La competencia en biología se refiere a una situación en la que dos o más individuos de la misma o diferentes especies se enfrentan entre sí para obtener recursos. Estos recursos suelen ser necesarios para su existencia, por ejemplo, el alimento, materiales esenciales, pareja y territorio.

    Este tipo de competencias entre seres vivos para defender, adquirir o mantener recursos es de gran interés para los biólogos evolutivos. Se cree que la competencia es una de las fuerzas impulsoras detrás de la evolución, la adaptación y la especiación.

    El mundo natural (y social) se encuentra inmerso en un proceso sin fin en el que los seres vivos compiten. Sin embargo, existen numerosos factores que influyen en la competencia biológica. Entre estos factores están la selección natural, el hábitat, disponibilidad de recursos y hasta tipo de especies que compiten. Por ejemplo, una especie que depende mucho de un tipo específico de nicho ecológico puede competir con otras especies que ocupan un nicho similar.

    Competencia en el Deporte

    Una competencia deportiva se refiere a un evento deportivo en el que dos o más equipos de atletas se reúnen para competir a nivel individual y de equipo.

    Generalmente, la actividad deportiva se rige por reglas específicas y tiene un fin determinado y un tiempo límite de duración. Idealmente, quienes participan en estas competencias se acogen a las reglas y organización de la disciplina. En estas actividades competitivas se mantienen marcadores, se determinan vencedores y pueden incluir algún tipo de premio o reconocimiento para estos.

    Así, la competición tiene clasificación, con ganadores y perdedores, según objetivos. Por ejemplo, en el fútbol, el ganador es el equipo que anota más goles (aunque también suelen haber empates). Hay muchos tipos de competiciones deportivas como el atletismo, la natación, la gimnasia, el patinaje sobre hielo y el boxeo, entre otras.

    Las competiciones deportivas se organizan por categorías de liga, serie o torneo. Como cada deporte es distinto y tiene diferentes objetivos, las reglas de una competición deportiva difieren de un deporte a otro.

    Tanto atletas como las y los aficionados suelen disfrutar de estas competencias. Las competiciones deportivas no solo enfrentan a varios rivales, sino que también son una forma de entretenimiento que existe desde la antigüedad.

    Competencia Lingüística

    En los campos de la psicología y la lingüística, la competencia se refiere a la capacidad de utilizar el lenguaje correctamente. En pocas palabras, la competencia lingüística es lo que una persona sabe sobre el uso del lenguaje. Las habilidades requeridas no se limitan a conocer las reglas gramaticales. Es muy importante tener conocimiento de cómo se usan las palabras en un contexto y cómo se integran en su uso.