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 ¿Qué es un Mandala? – Definición y Cómo dibujarlo

    Definición de Mandala

    El Mandala es un dibujo circular con decoraciones geométricas o trazos libres desde un punto central que se rellenan de color. Esta figura se utiliza generalmente como herramienta para la concentración y la meditación. Uno de los principales objetivos al colorear un Mandala es el de liberar la tensión, fomentar la creatividad y reducir el estrés.

    ¿Qué significa la palabra Mandala?

    De origen sánscrito, Mandala significa ‘disco’ o círculo ‘mágico’. La figura que conforma el mandala representa la unidad, la armonía y la infinidad del universo. Esta representación gráfica es originaria de la India, Tíbet, Japón y otras regiones asiáticas. Sin embargo, en la actualidad forma parte de varias culturas.

    Tipos de Mandala y significado

    Cada mandala es una manifestación individual, representa al ser vivo y su conexión con el mundo. De esta forma, las figuras que conforman un mandala tienen diferentes significados:

    • Círculos: representan lo ideal y completo, lo eterno, lo certero, cambios y transformaciones
    • Triángulos: se refieren al inconsciente, los cambios, la pasión y el vigor
    • Cuadrado: representa el equilibrio, constancia y estabilidad
    • Rectángulo: es un símbolo del sustento, prosperidad, estabilidad y enriquecimiento
    • Pentágono: trata de los cinco elementos de la naturaleza, agua, metal, fuego, madera y tierra
    • Hexágono: manifiesta las emociones negativas como la agresividad y las acciones impulsivas
    • Cruz: representa la necesidad de tomar decisiones y seguir un rumbo
    • Espiral: se relaciona con las energías curativas
    • Laberinto: simboliza la búsqueda interior para hallar el centro de sí mismo
    • Corazón: representa la energía del amor y los sentimientos que proceden de él
    • Estrella: su significado se asocia con la libertad y la espiritualidad
    • Mariposa: es un simbolismo de cambio, metamorfosis, renovación personal y evolución

    Significado de colores en un Mandala

    Así como a las figuras, a los colores también se les atribuye un significado dentro de un mandala. Se cree que cada color que se escoge proviene del subconsciente. Estos pueden representar un sentimiento, un deseo, una virtud o una emoción.

    Entre los colores más populares en un mandala se encuentran:

    • Negro: simboliza tristeza, muerte, ignorancia y misterio
    • Blanco: representa pureza, iluminación, perfección
    • Verde: manifiesta esperanza, crecimiento, felicidad, libertad y sanación
    • Azul: simboliza paz, alegría, serenidad y satisfacción
    • Gris: representa indecisión, ausencia de energía, expresa duda, melancolía e indiferencia
    • Rojo: evoca la energía pura vital, la pasión y la sensualidad
    • Naranja: es una manifestación de energía, laboriosidad, valor y ambición
    • Amarillo: es un símbolo de simpatía, luz, inteligencia
    • Rosado: representa altruismo, dulzura, paciencia
    • Morado: simboliza admiración, amor al prójimo, nobleza y sabiduría
    • Violeta: evoca la transformación, la magia, la espiritualidad e inspiración
    • Plateado: manifiesta capacidades psíquicas, indecisión
    • Dorado: simboliza sabiduría y lucidez
    • Marrón: representa la necesidad de arraigarse o de encontrar un lugar propio
    • Dorado: simboliza sabiduría, claridad, lucidez, vitalidad y grado máximo de perfección espiritual

    ¿Cómo hacer un Mandala?

    En línea se encuentran cientos de recursos para descargar y pintar mandalas. Si lo que se quiere es crearlo desde el principio, se necesitan ciertos materiales como: lápiz, regla, compás, bolígrafo, borrador, marcadores, crayones o acuarela.

    Pasos para crear un Mandala

    1. Dibujar la base del mandala: utilizando un compás, se elabora un círculo en el papel del tamaño deseado.
    2. Continuar dibujando la base: hacer círculos más pequeños dentro del círculo base. No tienen por qué llevarse la misma distancia entre ellos, pero sí deben estar centrados. Hacerlo hasta dejar un círculo pequeño en el centro.
    3. Detalles a lápiz: comenzar a dibujar con el lápiz pequeños detalles que en conjunto darán apariencia de complejidad al dibujo, pueden ser círculos, rombos o líneas combinadas. En este paso se da rienda suelta a la creatividad, cualquier forma geométrica es ideal para adornar el mandala.
    4. Detalles en la parte exterior: con el lápiz añadir detalles variados en la parte exterior para darle una apariencia más elaborada.
    5. Repasar con bolígrafo: una vez terminados los detalles y adornos que se desean colocar, se repasa con un bolígrafo.
    6. Colorear a gusto: combinar los colores como se desee.

    Importancia y uso de los Mandalas

    Según estudios científicos del psiquiatra suizo Carl Gustav Jung, a mediados del siglo XX, colorear estas figuras estimula el hemisferio derecho del cerebro. Esta región del cerebro se asocia muchas veces a las emociones y la creatividad. Se supone que así el hemisferio izquierdo del cerebro puede descansar y liberar la tensión del estrés.

    Es común que los mandalas se usen como técnica de relajación y concentración. Son una forma popular de arte terapia que permite la desconexión de lo cotidiano. Asimismo, aportan tiempo para la reflexión y el descanso. Adicionalmente, colorear mandalas fortalece la concentración, mejora la atención, la paciencia y tranquiliza la mente.

    Otros beneficios que se asocian a la actividad de pintar mandalas son:

    • Reducción de la ansiedad
    • Promueven la manifestación de las emociones
    • Impulsan la creatividad
    • Estimulan el sistema inmunológico
    • Fomentan el sueño y el buen descanso

    Los Mandalas y las prácticas espirituales

    Los hindúes y budistas fueron los primeros en usar mandalas como un instrumento espiritual para alcanzar un estado óptimo de meditación y conexión con el universo. Dentro de estas prácticas, el círculo representa lo sagrado, lo infinito y eterno, el universo en su forma perfecta sin inicio ni fin.

    Es decir, los mandalas tienen un significado espiritual de transformación. Así, contemplar un mandala despierta en las personas atributos positivos como el humanismo, la bondad hacia el prójimo y la sabiduría.